lunes, febrero 13, 2006
Cuando busco en la vieja caja de zapatos... malo.
Cuando me busco en ese CD que pone David 1... malo.
Había una bolisa de polvo.
Hoy me leí con menos años de los que tengo yo... y me parecí absurdo. Como un aspirante a humorista que no hace ni pizca de gracia. Como un aspirante a "Superman". Pedía perdón por escribir palabras como "personajillo", ¿No resulta tierno?
Ayer jugué en mi habitación... como cuando sólo hacia eso cuando tenía menos de 10 años. Y yací tumbado en la cama, sudando y jadeando. Y me sentí vivo y viejo después.
Ahora hay películas y canciones y llamadas que no llegan y números distorsionados y emborronados mientras giran en una lavadora. Y hay pocas ganas. Pocas ganas que renacen al ver lo estúpido que es tirar la toalla.
Y existe la cada vez menos hipotética sensación de haberlo hecho todo mal. Y la única certera de saber que no hay marcha atrás. La marcha atrás será de los inteligentes, de los conformistas o de los cobardes. Pongan ustedes las interrogaciones.
Tengo calor, me quito la chaqueta.
Nunca escribí para vender. Supongo que por eso los escritos que me quedan por escribir ocupan menos de media linea.
Y sigue habiendo gente que se molesta en hacer ante ti una especie de danza del vientre... mientras tú sólo piensas en irte a mear. Si es verdad que sólo se vive una vez... sólo me quedan faroles y cartas marcadas... porque los ases los gasté esperando ganar... y las demás del montón... las enseño con descaro.
Y el aire pesa.
Y las palabras más.
Y pensar que debería ser un optimista empedernido... puede que algún dia aprenda a serlo.
Puede.
Cuando me busco en ese CD que pone David 1... malo.
Había una bolisa de polvo.
Hoy me leí con menos años de los que tengo yo... y me parecí absurdo. Como un aspirante a humorista que no hace ni pizca de gracia. Como un aspirante a "Superman". Pedía perdón por escribir palabras como "personajillo", ¿No resulta tierno?
Ayer jugué en mi habitación... como cuando sólo hacia eso cuando tenía menos de 10 años. Y yací tumbado en la cama, sudando y jadeando. Y me sentí vivo y viejo después.
Ahora hay películas y canciones y llamadas que no llegan y números distorsionados y emborronados mientras giran en una lavadora. Y hay pocas ganas. Pocas ganas que renacen al ver lo estúpido que es tirar la toalla.
Y existe la cada vez menos hipotética sensación de haberlo hecho todo mal. Y la única certera de saber que no hay marcha atrás. La marcha atrás será de los inteligentes, de los conformistas o de los cobardes. Pongan ustedes las interrogaciones.
Tengo calor, me quito la chaqueta.
Nunca escribí para vender. Supongo que por eso los escritos que me quedan por escribir ocupan menos de media linea.
Y sigue habiendo gente que se molesta en hacer ante ti una especie de danza del vientre... mientras tú sólo piensas en irte a mear. Si es verdad que sólo se vive una vez... sólo me quedan faroles y cartas marcadas... porque los ases los gasté esperando ganar... y las demás del montón... las enseño con descaro.
Y el aire pesa.
Y las palabras más.
Y pensar que debería ser un optimista empedernido... puede que algún dia aprenda a serlo.
Puede.
