domingo, diciembre 19, 2010
domingo, diciembre 12, 2010
Pum pum pum. ¿Quién es?
Ah, eres tú.
Y no me vas a decir donde has estado todo este tiempo, Verdad?
Me da igual... como casi todo.
Porque me aburro soberanamente.
Porque entonces todo molaba pero el tren se fue, el barco zarpó.
Y el romanticismo se acaba con el quinto polvo... y que te voy a contar a ti que seguro no sepas ya...
¿Que las cosas no cambian?
Jooooooooooooooooooooooooooooooooooooooodo.
Ah, eres tú.
Y no me vas a decir donde has estado todo este tiempo, Verdad?
Me da igual... como casi todo.
Porque me aburro soberanamente.
Porque entonces todo molaba pero el tren se fue, el barco zarpó.
Y el romanticismo se acaba con el quinto polvo... y que te voy a contar a ti que seguro no sepas ya...
¿Que las cosas no cambian?
Jooooooooooooooooooooooooooooooooooooooodo.
jueves, diciembre 09, 2010
Hacia tiempo que no tenía un momento de inspiración mientras me duchaba.
¿Por qué no hacen las bolsas de plástico capaces de llevar una bolsa de patatas (para cocer)? Si quisiera llevarlas por el suelo no cogería las bolsas. De hecho ni las quería. ¿Para qué las hacéis?
Antes mi cuerpo molaba. Y mi cara. No sé si antes molaba más que ahora.
¿Quién se acuerda de Tuvalu? ¿O de que alguna vez nos juramos amor eterno?
Benditos mil novecientos...
Benditas cabalgadas sobre la hierba.
Hojas secas. Mañanas de domingo.
No pensé que mis manos pequeñas llegarían a ser un handicap.
Ni que pudiera haber algo más allá...
De momento el más allá son Rufus, Leti, Prince, Polo y el autosuficiente Hulki... bendito más allá para alguien que necesita muchos horizontes para ir haciendo que sus pequeños ojos perdidos vuelvan a ponerse, si no en su sitio, si un poco más del lado de alguien que todavía está aqui... por muchos que le vayan cayendo a la espalda...
¿Por qué no hacen las bolsas de plástico capaces de llevar una bolsa de patatas (para cocer)? Si quisiera llevarlas por el suelo no cogería las bolsas. De hecho ni las quería. ¿Para qué las hacéis?
Antes mi cuerpo molaba. Y mi cara. No sé si antes molaba más que ahora.
¿Quién se acuerda de Tuvalu? ¿O de que alguna vez nos juramos amor eterno?
Benditos mil novecientos...
Benditas cabalgadas sobre la hierba.
Hojas secas. Mañanas de domingo.
No pensé que mis manos pequeñas llegarían a ser un handicap.
Ni que pudiera haber algo más allá...
De momento el más allá son Rufus, Leti, Prince, Polo y el autosuficiente Hulki... bendito más allá para alguien que necesita muchos horizontes para ir haciendo que sus pequeños ojos perdidos vuelvan a ponerse, si no en su sitio, si un poco más del lado de alguien que todavía está aqui... por muchos que le vayan cayendo a la espalda...
