miércoles, enero 28, 2004
Odio tener tiempo para todo. Está decidido, paso de masturbaciones físicas y mentales. Lavarme los pies, por no tener otra cosa que hacer, comienza a molestarme. Tengo ganas de que mis pinreles canten la última de Bisbal y sea el vecino de al lado el que me llame la atención. Hace un rato metí la tele en la basura. Está decidido. Hoy cambio mi vida.